“Depravada y oscura”: una trabajadora social distribuía pornografía infantil en redes sociales

Una trabajadora social de Nueva York, Estados Unidos, se declaró culpable de distribuir pornografía infantil en redes sociales, por lo que podría afrontar una pena que va desde los cinco hasta los 20 años de cárcel.
Renee Hoberman —también conocida como “Rina”—, una terapista con licencia de Long Island, fue detenida en octubre de 2024 e imputada por distribución de pornografía infantil en el juzgado federal de Central Islip ante la jueza magistrada estadounidense Arlene Lindsay.
En aquel entonces, el agente especial a cargo de Investigaciones de Seguridad Nacional en Nueva York, William Walker, aseguró que la “posición de confianza como terapeuta con niños” agravó los “increíblemente oscuros y depravados delitos” de Hoberman.
Según informó la Fiscalía Federal del Distrito Este, Hoberman admitió haber utilizado aplicaciones de mensajería encriptadas como Telegram y Kik para recibir e intercambiar videos e imágenes digitales que mostraban a menores en conductas sexualmente explícitas.
“Los videos que la acusada distribuyó y buscó para su propio placer perverso mostraban a los miembros más inocentes de nuestra sociedad siendo restringidos y violados violentamente”, declaró el fiscal federal Joseph Nocella.
Entre ellos, varios videos de bebés de seis meses a un año de edad, quienes se los puede ver sometidos físicamente y violados por un hombre adulto mientras los menores lloraban y gritaban frenéticamente durante la duración de los videos, según describió la Fiscalía.
Al respecto, Nocella enfatizó que los crímenes de Hoberman “deberían indignar y ofender a todos los miembros decentes” de la sociedad, y advirtió que desde su oficina “perseguirá implacablemente a depredadores” como Rina, quienes “victimizan a aquellos que a menudo no pueden hablar por sí mismos”.
“Trabajaremos incansablemente para garantizar que aquellos que dañan a los niños y perpetúan la plaga del abuso sexual infantil y la pornografía infantil rindan cuentas con todo el peso de la ley”, remarcó.
La mujer también participó en múltiples chats en línea relacionados con el abuso sexual de menores. En dichas conversaciones, Hoberman simulaba ser el padre de varios niños menores de edad, con quienes supuestamente tenía relaciones sexuales y los castigaba al hacerlos desnudar y azotarlos.
La terapista invitó a otro usuario a visitar a su supuesta familia en Nueva York para juntos azotar y abusar sexualmente de los niños. Además, Hoberman describió haber abusado sexualmente de tales hijos y sus amigos, y luego envió dos videos que contenían material de abuso sexual infantil. Sostenía que estos videos representaban sus propios hijos.
Durante el mismo período de tiempo que Hoberman distribuía material de abuso sexual infantil en línea, también trabajaba como terapeuta en una organización con sede en Melville, Nueva York, que atiende a niños de hasta 17 años.
Fuente: www.clarin.com